Protocolo de intercambio de datos inmobiliarios

Es un tema recurrente en el blog y en el colectivo inmobiliario.

Parece que cada vez estamos más cerca de conseguir un estandar de datos pero todavía queda un camino que recorrer.

En una conversación con un representante de asesores inmobiliarios en Canarias, intercambiamos opiniones e ideas para hacer realidad que exista un protocolo de intercambio de datos para el sector inmobiliario.

¿Por donde empezar? Hay varias cuestiones que resolver.

Primero, la representatividad:

en sectores tan atomizados como el inmobiliario y el tecnológico, ¿quién tiene la fuerza suficiente como imponer (en el buen sentido) un formato de datos?

En el sector inmobiliario hay agrupaciones locales, regionales, asociaciones de profesionales, de APIs, redes de oficinas, franquicias, colectivos al amparo de la CEOE,… Pero ninguno con la suficiente envergadura por si sólo como para determinar cómo actuar, ni siquiera en su propio sector.

En el tecnológico, la existencia de programas de gestión inmobiliaria, de CRM, de MLS, de asociaciones, portales locales, portales inmobiliarios,… tampoco facilita la tarea de comunicar una decisión sobre cómo usar los datos inmobiliarios.

multiple listing service rets

Qué pasos deberían darse:

1 – El colectivo inmobiliario debe ponerse de acuerdo, buscar un consenso sobre lo que necesita. Tener un mismo y único objetivo ayuda a que sea más fuerte.

– Esa posición de fuerza del colectivo inmobiliario debe ser suficiente como para que las empresas tecnológicas lo tengamos en cuenta.

– Un primer objetivo sería que emisores y receptores de información tuvieran un protocolo único de intercambio de datos.

– El formato XML es un primer paso, como contenedor de datos y comunmente usado por empresas tecnológicas.

– Hay que determinar qué información se necesita, independientemente de que sea para un portal inmobiliario, para la web de un colaborador o para intercambiar entre distintas MLSs. Es decir, enumerar los campos que son obligatorios, como los datos del contrato de exclusiva.

– El formato no es tan relevante, Sí la información que debe contener. 

– Se necesita un único listado de tipos y subtipos de inmuebles, así como de división geográfica (municipios, comarcas, zonas, áreas, barrios,…).

– La definición de esos listados está viva, puede cambiar a lo largo del tiempo (se crean nuevos barrios y urbanizaciones). Debe haber quien gestione los cambios y se acepten como "oficiales".

– Un primer objetivo parcial sería establecer un intercambio de datos entre 1 tipo de emisor y 1 tipo de receptor. Por ejemplo, entre programas de gestión y/o MLS y portales inmobiliarios, puesto que éstos sólo necesitan "datos públicos" e intentar que se conviertan también en emisores de información, para recibir de ellos, por ejemplo, estadísticas de los contactos generados y que se puedan insertar en el programa de gestión.

2 – Compartir con los proveedores tecnológicos el objetivo y la necesidad de tener una única información para los campos de información y sus valores.

Los emisores deberían convertir sus datos en un fichero reconocible mediante el protocolo de intercambio de datos; los receptores deberían tener un sistema que interpretase la información estandar para adaptarla a sus entorno personalizado.

Lo ideal sería hacerlo en tiempo real, pero probablemente sólo sea posible en un primer momento para datos de inmuebles, no de relaciones entre inmuebles, contactos y procesos.

3 – Objetivos posteriores serían los de conectar datos de contactos y relaciones entre inmuebles y esos contactos: visitas, reservas, ventas,…

César Villasante

Artículos sobre Marketing y Tecnología Inmobiliaria