Cuando compras un producto, comparas el precio con sus características. Si es un producto común, el precio será el factor fundamental para decidir comprarselo a un vendedor o a otro.
Por eso no te enfadas cuando en tu coche de gama media no se incorporan las comodidades y prestaciones de un gama media. En productos, el precio delimita claramente lo que se obtiene a cambio.
En el caso de los servicios, esa medición precio/prestaciones, no es tan evidente.
Si eres runner, no te planteas comprar unas zapatillas de 20 euros; posiblemente compararás las de 120 euros, para elegir el modelo que se ajuste a tus expectativas y nivel.
Las usarás como una herramienta necesaria, consciente de que el motor eres tú mismo, con tus capacidades fíisicas y fuerza de voluntad.
Una web inmobiliaria no es debería ser un producto estandar.
Una web de bajo precio posiblemente tenga poco valor por si misma, a no ser que el cliente la use como herramienta y alimente su espacio online con contenido propio y original. Plataformas como WordPress o Blogger permiten crear weblogs por un precio reducido, generando un gran valor si se usa y alimenta de forma constante.
Del mismo modo, un desarrollo web de alto precio, no asegura el mejor diseño, ni las mejores funcionalidades ni el mejor posicionamiento.
Una web no debe ser un mecanismo autónomo ni automático. Hay tareas que se pueden automatizar, pero hay otras que requieren la acción directa o indirecta del propietario.
Algunas acciones que puede realizar el propietario de una web inmobiliaria para incrementar su valor:
– Informar con detalle a su público objetivo, de los servicios específicos y diferenciales
– Distinguir a clientes propietarios, compradores e inquilinos, para referirse a ellos de manera personalizada
– Generar contenido sobre la zona, sus ventajas, puntos de interés, servicios atractivos
– Mostrar extractos de informes y estudios de mercado,
– Ofrecer consejos y asesoramiento previo, actualizandolos segun cambien las situaciones del mercado, la legislación, el urbanismo,…
– Destacar de manera activa y frecuente propiedades inmobilairias
– Indicar las ventas y alquileres realizados, explicando el proceso hasta lograr cerrrar la gestión,
– Generar más contenido con ayuda de un blog inmobiliario conectado a la web
Ejemplos positivos de webs inmobiliarias en las que los clientes se han implicado en las decisiones de diseño, estructura y gestión de contenidos:
[metaslider id=13472]
– Pisos Moncada
– Mi Casa en Rivas
– Inmobiliaria Celayeta
- ¿Necesito usar herramientas de IA para mi actividad como inmobiliaria? - 25 septiembre 2024
- El auge de las inmobiliarias online - 21 agosto 2024
- Alternativas al Alquiler Turístico o VUT en España - 18 agosto 2024