DAFO, estrategia de comunicación, redistribución de mensajes

El Análisis DAFO es una metodología que compara la situación competitiva de tu empresa en tu mercado. Podemos actuar sobre factores controlables, como son las fortalezas y debilidades de nuestra empresa, pero conviene también estudiar factores externos, como son las oportunidades y amenazas del mercado.

El primer paso es evaluar nuestras debilidades, identificadas como los recursos, habilidades y actitudes que no disponemos o son escasos, lo que supone una barrera para lograr nuestros objetivos. Debemos preguntarnos qué se puede mejorar y cómo.

Puede que personalmente estemos decididos a usar las redes sociales, pero debemos motivar al resto de trabajadores y permitir que venzan el miedo al cambio, a exponer su actividad.

Por el contrario, las fortalezas nos indican aquellos factores que nos diferencian y nos colocan por encima de la competencia. Debemos reconocerlos y potenciar las ventajas de nuestros servicios, destacar la diferenciación y sacar provecho de los recursos disponibles.

Si el personal de la empresa tiene buena capacidad de comunicación, es conveniente trasladarlo al terreno de la conversación online, tanto para dar continuidad a la relación con contactos existentes como para crear conversaciones con otras personas.

Cuando nos preguntamos qué están haciendo nuestros competidores, estamos analizando las amenazas del mercado y los cambios en nuestro entorno a los que tenemos que adaptarnos.

Si conseguimos identificar esas situaciones, ser flexibles y adaptarnos al cambio, estaremos consiguiendo transformar las amenazas en oportunidades.

Una oportunidad es la tendencia de las personas a usar cada vez más las redes sociales para obtener información de productos y servicios, consultando directamente a las empresas o pidiendo recomendaciones de amigos y contactos.

Haz un análisis de tu empresa y el entorno, para extraer elementos que son favorables, de tu imagen, marca y servicios. Difunde tus conclusiones para que tus contactos te sitúen por encima de tu competencia.

Actúa sobre las debilidades y pide ayuda a tus contactos; no tengas miedo de reconocer lagunas en algunos puntos concretos.

Lo importante es tener la voluntad de mejorar y saber comunicarlo a tu entorno.

Competencia

Hemos hablado de ella al analizar el mercado y detectar amenazas y oportunidades pero, ¿sabemos cómo identificar y observar las buenas prácticas de nuestra competencia?

Busca en internet conversaciones relacionadas con el tema de tu interés, para detectar quien realiza acciones en ese sentido, qué comunica, quien las recibe y quien las contesta.

Google dispone de una opción de búsqueda en “tiempo real”, que muestra las últimas conversaciones relacionadas con la consulta realizada..

Es importante definir las palabras clave relacionadas con nuestro negocio y/o que pueden afectar a la imagen y reputación de nuestros servicios.

Si realizamos este análisis comparativo o Bechmarking, podremos detectar qué acciones son las mejores y adaptarlas a nuestra empresa.

Tendencias

No debemos ir en contra la corriente: una cosa es innovar y hacer cosas diferentes y otra ofrecer algo que a nadie le interesa.

Sigue la tendencia del mercado y anticípate, prevé las necesidades futuras.

Internet también te informa de la evolución de las consultas que se realizan en los buscadores; ante crecimientos de búsquedas sobre un producto o servicio, prepárate para poder ofrecerlo lo antes posible.

Prueba con Google Trends e Insights for Search para hacerte una idea de qué es lo más buscado en tu zona y qué términos se usan principalmente.

Clientes

¿Has considerado que tus clientes pueden ser más de los que crees? ¿O que puedes ofrecer una mayor abanico de servicios?

Posiblemente puedas dar un buen servicio a personas a las que no te estabas dirigiendo previamente y a tus actuales clientes ofrecerles más servicios relacionados…

Las redes sociales te ayudan a conocer mejor a tus clientes, tanto los que tienes como los potenciales. Detecta sus problemas, busca soluciones, ofréceselas.

Hazlo de forma pública para que los demás sepan que te preocupas por tus clientes y te ocupas de satisfacer sus necesidades.

Estrategia de comunicación

No es necesario crear un nuevo plan de comunicación exclusivamente para internet. Trata de integrar los mensajes en redes sociales con las campañas en medios tradicionales.

Cualquier campaña en medios offline debe tener su reflejo en medios online: si has encargado un flyer, conviértelo a un formato digital y difúndelo en tu web, blog y redes sociales. Haz lo mismo con folletos, revistas, cartelería,…

Piensa en el público a quien quieres hacer llegar tus mensajes. Es esencial segmentar el target: cada segmento de contactos se debe definir y agrupar. Por ejemplo, cada vez que agregues un amigo en Facebook o sigas a alguien en Twitter, etiquétalo mediante listas: Clientes compradores, Clientes vendedores, Usuarios con un interés bajo (candidatos), Clientes anteriores, Colegas de profesión, Contactos de la zona, Personalidades,….

Ahora hay que definir qué comunicar, si quieres centrarte es aspectos profesionales o quieres dar opiniones personales. Se pueden crear conversaciones en ambos sentidos, pero siempre usando el perfil adecuado. SI vas a comunicar que has captado una vivienda, hazlo con el perfil de empresa para que el mensaje llegue a los contactos que estén predispuestos a recibirlo.

Bajo esa premisa de difundir los mensajes con el altavoz adecuado, haz una lista de temas de los que quieras hablar y que puedan resultar interesantes para los grupos de contactos: Temas locales, Intereses personales, Servicios profesionales, Oferta: productos en cartera, vendidos,…

Redistribución de mensajes

Las redes sociales permiten sincronizar contenidos entre ellas; un mismo mensaje se puede enviar a diferentes plataformas y en diferentes formatos.

El uso de feeds RSS y de aplicaciones social media que conecten mensajes entre redes, permite simplificar el trabajo de publicación. Cuando publicamos un artículo en el blog, se lo podemos anunciar automáticamente a nuestros contactos en Facebook y Twitter. Lo mismo cuando publicamos nuevas fotos en Flickr, subimos un vídeo en Youtube, actualizamos nuestro perfil en Linkedin,…

Es importante determinar qué herramienta es la principal, desde donde se propagan los mensajes. Yo aportaría por el blog como central de comunicación online.

Esta tarea de redistribución nos ayuda en la Gestión del tiempo:

– Identifica las tareas que suponen pérdida de tiempo, repetitivas, que dupliquen esfuerzos, acciones no relevantes, con escaso valor añadido o sin resultados

– Prepara una estrategia de ahorro de tiempo, mediante la organización de horarios y tareas

– Aumenta la conversión, elimina llamadas de consulta básica, que cada contacto sea de valor. Para ello debes ofrecer información detallada en tus mensajes para evitar dudas simples.

– Prospección: busca a quien te busca, conoce a tus seguidores, encuentra a quien esté buscando servicios que ofrezcas y todavía no te conozca

– Refresca los contactos: actualiza sus datos con acciones directas: llamada, email, mensaje directo en Twitter, solicitud de amistad en FB,…

La serie “Plan de Marketing en redes sociales” se compone de 3 capítulos:

Parte I – Definición de objetivos, de target y de redes

Parte II – Análisis DAFO, estrategia de comunicación, redistribución de mensajes

Parte III – Medición, aplicación de medidas correctoras

César Villasante

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